Los consumidores aplican una variedad de criterios al juzgar la calidad de un huevo, desde la resistencia de la cáscara hasta la frescura y la trazabilidad del color de la yema.
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dsm-firmenich ha estudiado las preferencias de los consumidores en muchas partes del mundo y descubrió que, si bien las preferencias varían, en la mayoría de los países los consumidores prefieren un color de yema de huevo con un valor dsm-firmenich YolkFanTM de 12 o más.
El dsm-firmenich YolkFanTM ofrece un medio sencillo, preciso y uniforme para medir el color de la yema de huevo. Para garantizar una precisión óptima durante la medición, se deben tener en cuenta los siguientes factores.